El día que conmemoraba cada año mi nacimiento había llegado: 16 de Agosto. El verano cada vez estaba más próximo a su fin, cosa que entristecía tanto a hijos, como padres. Todo el mundo tendría que volver a trabajar regularmente.
Me desperté rascándome la tripa, como siempre. Para mí, ese año era como otro día cualquiera, no tenía demasiada emoción por ello. Me fui al cuarto de baño, me aseé y bajé hacia abajo, mirando a Leo que se acercaba a las escaleras.
-Hola feo..- le dije acariciando su lomo con cariño.
Mi madre se acercó a mí, - Felicidades hija.- me dijo felicitándome y dándome dos besos. Le abracé olvidando por un momento todo lo ocurrido.
-Gracias Mama…- susurré esperando a que terminara de abrazarme para apartarme de ella y disponerme a poner la mesa.
Mi hermana llegó por detrás y me dio un palmetazo en la espalda, - Felicidades Piliii!- dijo abreviando mi nombre para hacerme rabiar.
-Gracias¬¬- murmuré mirándole de mala manera ,pero recibiendo de todos modos sus dos besos.
-Toma e.e- me dijo tendiéndome una bolsa con un paquete en su interior.
-Mmmm…¿qué será, será?- le pregunté sacando el envoltorio de la bolsa. Lo miré detenidamente…extrañamente tenía la pinta de un CD.
-Ábrelo ya e.e- me dijo picándome un hombro.
-Ya voy, ya voy – dije abriéndolo y quedándome con cara de estúpida.
-¿Te gusta?- me pregunto sonriéndome con dulzura.
-Si Joder..Gracias *ooo*- dije mirándole y abrazándola. Era una camiseta de Black Veil Brides. Me pregunté como se las había apañado para envolverlo de semejante modo…Interesante…
-De nada…es mío y de Zapata e.e- susurró apartándose de mí, para irse a terminar de poner la mesa.
-Toma…- dijo mi madre dándome otro al mismo tiempo que mi padre entraba por la puerta.
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