Interesante, la Navidad puede ser muchas cosas : la celebración por el Nacimiento de Jesús, una fiesta comercial y consumista, una época para estar con la familia y los amigos o la mejor época del año para un niño.
Una celebración por el Nacimiento del Niño Jesús, por creencias religiosas.
Una fiesta comercial porque es de las épocas del año que más dinero se gasta, con el rollo de regalos, comida, etc etc.
¿Y para un niño qué es?... Para un niño es la época de la magia, de la inocencia y la imaginación. De creer en todos sus sueños, esperanzas e ilusiones. De pensar que un hombre gordo, y bonachón entra por su chimenea dejándole regalos y juguetes, y después de unos días que los tres Reyes Magos de Oriente, vuelven a repartir regalos, aunque a los niños malos muy muy malos les espera un buen cachito de carbón :D.
Pero , cuando uno crece, pierde esa ilusión, esa esperanza, deja de creer en al magia, entonces la Navidad pasa a ser la misma época todos los años en la que te reúnes con la familia, que va cambiando con el tiempo: para comer turrón, cantar villancicos, recibir regalos pero sin esa ilusión, para charlar, reírse y hablar. En conclusión para disfrutar de una buena reunión familiar. Si te lo pasas bien, pero tú quieres volver a esos días en los que te acostabas la noche anterior con los nervios a flor de piel, para despertarte al día siguiente corriendo a abrir los regalos que te había traído Papa Noel o los Reyes Magos.
Por eso, por no destrozar esa ilusión, nunca has de decirle a un niño inocente, que no existen los Reyes , ni el Señor Noel porque entonces destrozarás sus ilusiones, sueños y esperanzas y acabarás arrebatándole la cualidad más valiosa de un niño… la Inocencia.
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